Conversando con un conocido me dijo: "Esa muchacha que va allá estuvo conmigo, y es más fácil que el coño, nos conocimos y esa misma noche nos acostamos". Eso me dejó pensando bien intrigada y le dije: "Qué pensará ella de ti?, ¿No estarás siendo de la misma forma utilizado?, ¿Qué te hace llamarla fácil?, tu lo eres también en todo caso.
Ahora bien, según Nancy Linn Desmond, “Fácil” es un adjetivo que se utiliza para describir a una mujer que tiene la moralidad sexual de un hombre, y ¡Pienso qué es cierto! Se suele emitir ese juicio contra las mujeres que queremos llevar una vida sexual activa, libre de compromisos y tabúes, pero ¿Por qué no se califica a los hombres de esa forma cuando se acuestan con cuanta mujer se les atraviese? Esto solo puede reducirse al tan mentado machismo, inmadurez, inseguridad o una simple confusión en la mente de estos seres.
No es un secreto que hoy en día las mujeres tenemos la misma libertad que los hombres, las mismas ocupaciones, incluso me atrevo a decir que en muchas ocasiones somos hasta más valientes, entonces, ¿Por qué razón quieren venir a intentar denigrarnos con eso de que somos “fáciles”? ¿Quiénes son ellos para determinar que eso sea así?, evidentemente tenemos los mismos derechos, y podemos elegir acostarnos con quien mejor nos parezca.
Que desagradable cuando se lanzan como buitres tras una aventura amorosa, sin compromisos ni ataduras, y se burlan incansablemente de las mujeres que por ingenuas esperaban algo más que simple sexo, y quedan por completo desilusionadas, y como si no bastara, hablan pestes de las chicas con las que se acuestan para alimentar su estúpido ego, que femeninos se ven, cuán chismosa de cuadra, expresándose de forma despectiva y criticando nuestras acciones, como si ellos fuesen ejemplo honorable de moralidad, nada peor que un hombre que sea tan “Mamita”.
Ni hablar de cuando ponemos en evidencia nuestro estado civil, al decir que somos madres solteras, divorciadas, que acabamos de terminar una relación o simplemente estamos solas, les cambia inmediatamente la percepción de lo que buscaban, y se les va a la mente la grandiosa posibilidad de acostarse con nosotras, ven su supuesta oportunidad y entonces piensan: “La chica se encuentra sola, tal vez un poco necesitada, y yo amablemente puedo hacerle el favor, será una tarea fácil, sin necesidad de mentir mucho, y me divertiría”. ¡Qué payasos! Aparte de fáciles jugueticos según ellos. Lo triste del caso es que muchas mujeres permiten (no me incluyo) que se les etiquete de esa manera, y cometen el error de meterse con ese tipo de hombres, y caen en lo mismo una y mil veces, aún sabiendo como son. Sean astutas mis niñas, a este tipo de hombres se les lanza bien lejos. ¡Debemos darnos nuestro lugar, y tener el caché de estar con quien nosotras queramos, no con todo aquel que quiera estar con nosotras!
Es muy sencillo, no dejemos que nos califiquen como “fáciles", somos mujeres que libremente elegimos actuar de la forma que queramos y nos haga sentir bien, también tenemos la capacidad de decidir con quien estar o no, y hacer completo y autónomo uso de nuestra sexualidad, todo aquel que quiera cuestionarnos, o comentar intimidades es tremendo “Mariscal de Ayacucho”.
Henycar G. Sánchez S.
@SpiritualLove86